El primero de agosto entrará en vigencia el acuerdo de asociación entre la unión europea y Centroamérica, sin
embargo nuestro país está en desventaja tomando en cuenta la falta de legislación
que proteja los recursos naturales que podrían ser explotados como resultado
del mencionado acuerdo.
Lo anterior, fue expuesto por el ambientalista Julio Sánchez
asesor político del centro Humboldt,
quien externó que la demanda de
productos alimenticios por parte de Europa, podría significar un riesgo para el país
considerando la capacidad de producción nacional ante
uno de los mercados más exigentes del mundo.
En este sentido, el
experto hizo énfasis en proteger los suelos
sobre todo en la región del Caribe, donde se está sembrando palma
africana, para producir biocombustibles sin ningún control por parte del gobierno, situación que podría empeorar por la
demanda de compradores del viejo continente.
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